Pues sí, 16 años después desempolvo este blog para ir publicando por aquí en español las entradas correspondientes a mi participación en el XV AHPC.
Contado muy rápido, el Analogue Hobbies Painting Challenge es un desafío amistoso en el que gente aficionada a pintar miniaturas se pican entre sí (y contra sí mismos) de manera saludable para, durante los meses de invierno, pintar miniaturas como locos. Antes de empezar el Desafío te propones una cantidad de miniaturas que vas a pintar y a medida que vas pintando vas publicando entradas en el blog oficial.
El Desafío me llamó la atención primero porque el ambiente es muy acogedor y amistoso, y todo el mundo se da ánimos entre sí para sacar adelante sus compromisos de pintura. Doy fe de que es cierto. Además, aquí la norma principal es el honor. Por ejemplo, antes de la fecha de inicio del Desafío puedes preparar las miniaturas: imprimirlas o montarlas, limpar las rebabas, e incluso imprimarlas, pero no puedes empezar a pintarlas. ¿Alguien te va a andar vigilando por si has empezado a pintar antes, o si no has pintado tú realmente las miniaturas? Pues no. Puedes meter una trola, pero todos los participantes dan por hecho que hay sinceridad. Por último, para poder participar en el Desafío tienes que llevar a cabo un acto solidario. En esta edición, por ejemplo, tienes que realizar una donación a Médicos Sin Fronteras (el año pasado tenías que hacer una donación de libros a la biblioteca de tu barrio).
Así que nada. El próximo jueves se publicará mi primera entrada, y un par de días después la podrás leer en español en este blog.
Si te interesa saber más sobre el AHPC puedes hacer tres cosas:
- Investigar en su web.
- Escuchar un interesante episodio del podcast de Little Wars TV en el que Curt (el inventor del Desafío) lo explica todo muy requetebién; yo conocí la iniciativa gracias a este podcast.
- Preguntarme a mí, que estaré encantado de ahondar en los entresijos del Desafío.
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